El verano que inventamos la nieve, de Ana Draghia

el verano que inventamos la nieve

El verano que inventamos la nieve fue mi primera lectura del año. Cada vez que pienso en la historia y sus personajes hay algo que se me remueve en el interior. Creo que puedo decir desde el principio que la historia me dejó muy calentita por dentro.

La novela es todo lo que necesitaba como primera lectura del año para motivarme a seguir leyendo, a pesar del poco tiempo. El género no es otro que juvenil contemporánea. Pero, si sabes leer bien entre líneas, te darás cuenta de que la autora nos lleva de la mano por el duro camino de hacerse adulto y afrontar todo lo que nos ha pasado. Porque todo eso es lo que nos hace ser quienes somos.

 

Sinopsis y detalles de la compra

Lucile acaba de llegar a la Villa dei Cardellini, en la Toscana, donde va a convivir con el novio de su madre y su hijo, Timmy. La villa, con sus luces y sus sombras, se convierte en un lugar lleno de sensaciones y recuerdos en el que Lu redescubre el verdadero significado de la familia, los sueños y el amor, pero también se topa con un oscuro secreto que se remonta a 1930.

¿Qué hay de verdad en la antigua leyenda que asegura que la casa está habitada por los fantasmas de Beatrice y sus jilgueros?

¿Y si después de todo el amor no es suficiente para salvarnos del olvido?

 

Longitud versión impresa: 406 páginas

Fecha de publicación: 15 de marzo del 2021

Precio tapa blanda: 17,90€

Precio eBook: 4,90€

 

Qué fue lo que más me gustó

Timmy.

Tal cual. Fue lo que más me gustó de todo el libro.

Cuando empecé a leer tengo que decir que Lucile me repugnó un poco en varios aspectos. Vale, estaba siendo tremendamente dura con ella. Quise seguir leyendo porque, como escritora, sé que es necesario mostrar a los personajes tal cual son. Sobre todo, al principio. Por el viaje del héroe y eso, ya sabes.

Pero la forma en la que Lucile se comunicaba con los demás, al final, terminó hasta gustándome. Me parecía muy fresca (y no en el buen sentido, en primer lugar) y, de repente, me identifiqué con ella un montón. Los motivos por los que así fue no vienen demasiado al caso. La cuestión es que, de una página a otra, la adoraba con todas mis fuerzas.

Y qué curioso que fue el mismo momento en el que Timmy comenzó a resultarme un tanto insoportable.

Y creo que esa fue una de las cosas que más gustó del libro. Los personajes son tan reales como nosotros mismos. A veces te caen bien y otras, mal. Vamos, igual que cualquier persona a la que acabas de conocer. Las situaciones se sentían reales y todo lo que ocurría, para mí, tenía sentido.

Aunque al principio me resultó un poco utópico, me encantó el hecho de que la madre de Lucile la hubiese mandado primero sin ella a un lugar desconocido. Con gente desconocida. Ella siempre estuvo allí, en realidad. Estaba en casi todos los capítulos del libro. Pero la evolución con la que Lucile hablaba y pensaba de ella fue de las cosas que más bonitas me parecieron.

Sobre todo, ahora que yo misma soy mamá.

Lucile es un personaje muy fuerte que no se lo cree. Timmy también es alguien de ideas claras. Y los constantes choques entre ellos por tener un carácter tan igual se me hizo una delicia.

Pero, sin duda, lo que más me llenó de orgullo al leer fue el camino que ambos recorren hacia la adultez.

 

Qué fue lo que menos me gustó

La leyenda de Beatrice.

No es que no me gustase. Es que yo estaba demasiado concentrada en todos los demás asuntos que llevaban Lu y Timmy entre manos como para encontrar esa parte interesante. Aunque tengo que reconocer que con uno de los capítulos me costó un montón dormirme porque me castañeteaban hasta los dientes. Y hasta aquí digo, nada de spoilers.

Creo que, sin la leyenda, el libro no habría sido igual, así que sí que es necesaria. Pero también creo que, para las que se concentren demasiado en la historia de los dos adolescentes, esta parte podría resultar prescindible. Y, a pesar de ello, no la quitaría por nada del mundo.

 

El libro no es demasiado corto, pero si ahora mismo estás buscando una lectura rápida y fresca que te transporte a los meses del verano, entonces este es tu libro. Estoy segura de que Lu y Timmy no van a decepcionarte.

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